Para los que quieren mantener la línea y llevar una vida sana, no hay otra opción. Es esencial comer fruta. Como todos sabemos desde la infancia, la fruta tiene un alto valor nutritivo, ayuda a prevenir enfermedades como la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares. Pero a pesar de tantas cosas buenas, los portugueses (los españoles?) siguen sin apostar por ella. Al menos, no tanto como deberían. Según la Encuesta Nacional de Alimentación y Actividad Física de 2017, la cantidad de fruta al día que consumen los portugueses es inferior a la recomendada. De media, consumimos un 7% menos de fruta de lo que indica la rueda de los alimentos.
No es ni todo ni nada. La cifra correcta es el 20%.
Según los estudios, el 20% de nuestra ingesta energética diaria debería provenir de la fruta. En total, se trata más o menos de 3 o 5 raciones, de 160 gramos cada una.
Si hay que comer, que sea fruta de temporada. Su sabor y su valor nutritivo son perfectos. Pero no hace falta comer siempre lo mismo hasta hartarse. Basta con variar. Incluir frutas diferentes en tu dieta te aporta otro tipo de vitaminas y nutrientes. Está muy bien estar lleno de vitamina C, pero también es bueno tener alguna de las otras.
La fruta: aliada de la alimentación
Quien come fruta tiene un gran aliado en la prevención de la obesidad, en la sensación de saciedad y, además, es un alimento bajo en grasas. Pero la cosa no acaba ahí. Además de estos beneficios, también podemos mencionar la contribución a la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y varios tipos de cáncer. Y para los que ya estén cansados de tantas ventajas, hagamos una pausa para recuperar el aliento...
¿Hemos terminado ya? Porque aún nos falta saber que refuerza el sistema inmunitario, regula la flora intestinal y la tensión arterial, e incluso previene enfermedades como el Alzheimer. Suena demasiado bien, pero es verdad. Una pequeña pieza de fruta puede marcar la diferencia.
¿Fruta rica o rica fruta?
En realidad, son las dos cosas. Pero pongámonos más técnicos.
Fruta rica en proteínas
Ya sabes que sin energía no vas a ninguna parte. Por eso tu cuerpo necesita proteínas. Son ellas las que actúan sobre la estructura y función de las células, órganos y tejidos del cuerpo humano, y también contribuyen al desarrollo de músculos, huesos, piel y cabello. Para más información, consulta los principales proveedores de proteínas: aguacate, albaricoque, kiwi y moras.
Frutas ricas en hierro
Si hay algo que les encanta a las células, es el hierro. Es el responsable de su crecimiento, desarrollo y funcionamiento. Si tienes oxígeno en tus células, es gracias al hierro, ¡con un impacto directo en tus niveles de energía o fatiga! Así que dale las gracias al hierro. Y la mejor forma de darle las gracias es comiendo más manzanas, plátanos, naranjas, aguacates, fresas y arándanos.
Fruta rica en calcio
¿Huesos fuertes? Habla con el calcio: el mineral esencial para la salud de tus huesos. Contribuye a prevenir enfermedades como la osteoporosis y está presente en el mango, el kiwi, la naranja y la pera, así como en las uvas y las moras.
Frutas ricas en potasio
Del corazón a los músculos, el potasio está en todas partes. Interviene en la regulación del ritmo cardíaco y la presión arterial, así como en las contracciones musculares y los impulsos nerviosos del organismo. Y por si fuera poco, incluso elimina toxinas.
Cuando hablamos de potasio, el plátano es la gran estrella. Conocida por ser una de las frutas más ricas en potasio, contiene 430 miligramos de potasio por cada 100 gramos. Pero hay más: aguacate, kiwi, albaricoque y níspero.
Ahora ya sabes por qué muchos deportistas consumen plátanos antes, durante y después de la actividad física.
Después de esta estupenda macedonia, tienes todas las bases para mantener una dieta sana, rica y variada. Ahora ya no hay excusas.
