Ya es un cliché escuchar "el desayuno es la comida más importante del día". Pero por mucho que se diga, esta comida se sigue dejando de lado. El problema es que al no desayunar de forma saludable, estamos comprometiendo nuestra salud y bienestar.
¿Mañanas a medio gas? Pon más energía
No hay nada mejor que romper el ayuno con un desayuno saludable con todo lo que te corresponde: energía para que tu cuerpo vuelva a funcionar. Saltarse esta comida significa no tener el motor funcionando correctamente. Lo que en este caso se traduce en somnolencia y dificultad para concentrarse.
"Ah y entonces, saltarse el desayuno ayuda a adelgazar." No, ¡es mentira! Comer a primera hora de la mañana evita comer en exceso a la hora de comer. Por no añadir que sigue estando asociado a un menor riesgo de cardiopatías. Así que no hay duda: hay que desayunar. Pero no basta con comer, hay que comer bien.
No dejes tu desayuno a pan y agua
Al fin y al cabo, ¿qué hay que comer para salir de casa en buenas condiciones? Pues bien, un buen desayuno debe hacer que tu cuerpo funcione correctamente. Y para eso necesitas vitaminas, minerales, proteínas, fibra, hidratos de carbono y grasas.
En otras palabras, significa comer cereales y derivados, productos lácteos o sus sustitutos, y fruta. Como el 70% de nuestro cuerpo está formado por agua, también puedes beber un vaso o dos para reponer tus niveles de hidratación.
Sí, las mañanas siempre son movidas. Pero eso no puede ser una excusa. Para hacerte la vida más fácil, compartimos contigo algunas ideas de desayunos saludables para ti y toda la familia.
Desayuno para los tardones
Para los velocistas matutinos, tenemos dos soluciones. Yogur natural con copos de avena y fruta, o coge la batidora y prepárate un batido de frutas. En 5 minutos tienes todo lo que necesitas para empezar el día.
El desayuno de los campeones
Si lo que buscas es energía, las gachas de aguacate son una buena opción. Tritura el aguacate con un plátano y una bebida vegetal. Después, remátalo con moras y pepitas de cacao y estarás listo para afrontar el día con esta bomba energética.
Es por la mañana cuando se empieza a beber (zumos naturales y verdes)
¿Quién dijo que lo sencillo tiene que ser aburrido? Seguro que no una persona que empieza el día con zumos naturales o zumos verdes.
Para los naturales, prueba nuestro zumo de remolacha. Todo fruta y verdura, ¡sin agua añadida, azúcar ni conservantes! Para los días con más tiempo, puedes poner en la licuadora una remolacha pequeña, una zanahoria y una manzana roja con piel y agua. Luego, acompáñalo de un bocadillo de pan integral con requesón y es una maravilla.
En cuanto a los zumos verdes, la cuestión es distinta. ¿Has probado nuestro zumo de pepino y apio? Una combinación de manzana, pepino, apio, espinacas y limón. La mezcla de frutas y verduras hace que tu cuerpo trabaje y se desintoxique. Es un buen comienzo para ser productivo. Para el fin de semana, he aquí el desafío: ¡crea tu propia receta con verduras de hoja verde oscura, fruta, legumbres como la calabaza e incluso tubérculos como zanahorias y boniatos! También puedes añadir semillas a tus zumos verdes para hacerlos aún más nutritivos. Parece mucho lío, pero confía en nosotros. Tus desayunos nunca volverán a ser lo mismo.
Como puedes ver, hay un montón de buenas recetas para desayunos saludables. El truco está en planificarlo todo con antelación. Si logras hacerlo, te garantizamos que no te apetecerá saltarte esta importante comida.